Tranquera Abierta | Ocla | Leche | Cadena Láctea

El consumo lácteo sigue en caída

Los productos con mayor valor agregado son los que más sufren el retroceso en ventas por la fuerte retracción del poder adquisitivo, especialmente de los sectores medios. En los primeros 5 meses del año hubo una merma del 16%

La comercialización de lácteos sigue planchada de la mano de una demanda que sufre el deterioro del poder adquisitivo de sus ingresos y productos que son, de acuerdo a los relevamientos de precios en góndola, de los que más aumentos mostraron en el primer tramo de 2024.

En ese sentido, la comparación interanual de mayo mostró una disminución en volumen del 11,4% y del 11,3% en litros de leche equivalentes. La información proviene del Panel de industrias lácteas.

Pero, el acumulado de los primeros cinco meses del año muestra una caída del 16% en volumen de productos y del 13,2% en litros de leche equivalentes (-13,7% en el promedio diario).

Un trabajo del Observatorio de la Cadena Láctea (Ocla), explica que puede observarse, analizando por grupo de productos, una caída muy importante en todos los rubros salvo quesos que retrocedió un 7,6% en litros equivalentes.

“Los productos de mayor valor agregado y unitario como quesos de pasta muy blanda, quesos rallados, leches saborizadas, yogures, flanes y postres presentaron una gran caída asociada a las subas de precios y al retraso en el poder adquisitivo del sector medio de la población que demanda en mayor cuantía estos productos”, indicó el informe.

Luego emite dos advertencias: el relevamiento captura una porción mayoritaria de las ventas totales, quedando fuera ventas que posiblemente puedan tener un comportamiento diferente al descrito en el cuadro. Además, “escenarios como el actual donde hay un fuerte deterioro de los ingresos reales de la población, hacen que proliferen las ‘ventas informales’ que obviamente ninguna estadística puede registrar y además han crecido fuertemente productos que por precio sustituyen el consumo de lácteos, como rayados, bebidas con lácteos, margarinas y otros similares”, indicó.

Un punto positivo que se destaca es que en mayo se dio un volumen 6,9% superior al mes previo y en litros de leche equivalente se incrementaron un 4,8% en la comparación total mensual y crecieron 1,4% en el promedio diario.

En otra mirada, el Balance Lácteo que dispone de los valores de producción, existencias, importaciones y exportaciones con información oficial, calcula por diferencia el consumo. De este modo, para los primeros cinco meses del 2024 determinó una caída de consumo doméstico total del 18% y del 20% en el consumo per cápita, siempre medido en litros de leche equivalentes y en esta oportunidad corregido en cantidad días del período.

Más allá de algunas pequeñas diferencias que pueden arrojar las distintas formas de observar el mercado, el informe remarca “como dato muy relevante que el proceso de fuerte caída del consumo iniciado a finales del año pasado se viene desacelerando y algunos rubros como leches fluidas, quesos, manteca y postres, presentaron mejoras en sus volúmenes en el último mes de mayo 2024”.

Luego, el informe del Ocla presentó una serie de gráficos en los que se presentan las ventas (en miles de litros), a abril de cada año (refrigeradas y no refrigeradas), donde se puede ver por un lado el descenso en el total de leches fluidas que se viene dando en los últimos 8 años. Por otra parte, se evidencia cómo van creciendo en participación las leches no refrigeradas en detrimento de las leches refrigeradas, pero en estos últimos meses hubo una reversión a ese proceso, volviendo a recuperar algo de terreno las leches refrigeradas o en sachets.

Para los quesos, el principal rubro de destino de elaboración y comercialización de productos, se da una situación de caída más atenuada donde se prioriza por precio, al peso (fraccionados) y con prevalencia de productos más commodities (cremoso, barra y duros “frescos”) que especialidades.

El trabajo luego remarca que “a pesar de los comentarios, respecto al cuidado que hay que tener al analizar las bajas y subas de ventas de los diferentes productos en el período actual, lo que es contundente es que las ventas y por ende el consumo, presentan en los últimos años una tendencia a la baja en general y una primarización del mismo (productos más básicos: leches fluidas no refrigeradas, quesos al peso de segundas y terceras marcas y yogures bebibles de litro) en detrimento de aquellos productos de mayor valor agregado y por ende económico”.

Y agrega: “Esta situación sin duda se da por un fuerte deterioro de los niveles de ingresos reales, fundamentalmente de los segmentos medios de la pirámide de ingresos, lo cual al margen de reducir el volumen de consumo, afecta el valor del mix de ventas haciendo que se facture un menor valor en las ventas internas”.

Por último, observa que los “controles de precios”, agudizaron el proceso de menor recaudación de la cadena, al igual que la vigencia de derechos de exportación y tipo de cambio retrasado. En función al nuevo escenario en la política económica, con libertad de precios en el mercado interno y sin derechos de exportación y tipo de cambio algo más competitivo en el externo, modificarán significativamente la estructura del destino comercial de la leche (de 80/20 a 70/30).

las más leídas