El hombre, de 61 años, sufrió un traumatismo de cráneo severo y desplazamiento de tórax, por lo que fue asistido primero por bomberos voluntarios y luego por el servicio de emergencias, mientras fue trasladado de urgencia hasta el Hospital San Antonio de Padua.
Las heridas se produjeron alrededor de las 16 del lunes, mientras se encontraba reparando un automóvil en el sistema hidráulico de elevación y, por causas que se tratan de determinar, se produjo su caída, lo que le provocó heridas que terminaron con su vida.
Aguilera fue socorrido por sus compañeros de trabajo, quienes rápidamente llamaron a los bomberos y retiraron el vehículo que lo estaba aplastando.
Ante la gravedad de la situación, se diagramó un corredor sanitario desde barrio Alberdi hasta el Hospital San Antonio de Padua, donde la ambulancia demoró tres minutos, se indicó.
Los médicos de la guardia ya tenían todo preparado para iniciar la atención.
Aguilera falleció a la hora de haber ingresado al centro médico, por la gravedad de las lesiones sufridas por la violenta caída del automotor.
El Ministerio Público Fiscal ordenó que personal de Policía Científica realice las pericias en el taller de tren delantero donde se produjo el grave siniestro, mientras se incorporaron los testimonios de los compañeros de trabajo, testigos presenciales de la tragedia.
En medio de las muestras de congoja y consternación, los restos de Aguilera fueron sepultados en el cementerio local.
