A lo largo de un mes de deliberaciones en la Cámara Primera del Crimen, los jurados populares y los dos técnicos coincidieron en la inocencia de Mariano Rivarola, Cristian Ortiz, Jonathan Palacios y Néstor Robledo, por lo que el crimen del denominado “zar de la droga” no tiene autores. Coincidieron en “insuficiencia probatoria” en la investigación.
Segundos después de las 12, la doctora Natacha García, presidenta de la Cámara Primera del Crimen, leyó la sentencia que absolvía a los acusados, para la alegría de los acusados, sus abogados y los familiares.
El fiscal Julio Rivero había cambiado la calificación legal para acusar a los imputados. Dejó de lado la figura de homicidio calificado por alevosía y precio o promesa remuneratoria; por lo que consideró que Rivarola y Ortiz habían ideado el crimen, con la participación secundaria de Palacios y Robledo (no pidió una condena), cambiando la figura legal a homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego.
Rivero había solicitado una pena de 12 años para Rivarola, once y medio para Ortiz y ocho para Palacios.
Sin identificar
En ningún momento se pudo determinar al autor de los disparos que acribillaron a Torres a las 21.02 del 16 de enero de 2019, al frente de su casa de Laprida al 1264. Tampoco a la persona que lo acompañaba en ese momento.
El caso incluyó escuchas telefónicas que ubicaron a los acusados en Rosario días antes del asesinato, lo que reforzaba la hipótesis de que el crimen se había planificado en esa ciudad. Sin embargo, las pruebas no fueron suficientes para convencer al jurado.
Rivarola y Palacios salieron en libertad desde el Palacio de Tribunales, mientras que Ortiz y Robledo siguen presos por condenas de la Justicia Federal.
Antes que los jurados populares debatieran, la hija de Torres hizo uso de la palabra y no pudo seguir con su reclamo de justicia por el llanto y el dolor por el homicidio de su padre.
Gabriel Bossi, amigo y mano derecha de Torres, cuestionó la investigación judicial y dijo que el fallo lo sorprendió, aunque aclaró que no tenía conocimiento de si alguno de los acusados tuvo participación en el asesinato.
Bossi estaba a metros de Torres en el momento en que fue acribillado.
Los abogados Rolbi Valdivieso y Miguel Àngel Gavier cuestionaron la investigación y aseguraron que no hubo elementos que incriminaran a sus defendidos Palacios y Rivarola a lo largo de las audiencias.
Valdivieso dijo que no eran pruebas para una acusación como un crimen y recordó que la etapa inicial del proceso estuvo viciada por la participación del exjefe de Investigaciones de la Policía, quien fue imputado por asociación ilícita en la causa federal por lavado de activos, que incluyó a la banda que lideraba Torres.
Gavier afirmó que “la causa se elevó a juicio por la presión social para que haya culpables”.
Víctor Ortiz, padre de Cristian, aseguró que su hijo nunca estuvo en Río Cuarto, como había establecido en el entrecruzamiento de llamados por parte del Departamento de Investigaciones Operativas (DIO) de la ciudad de Córdoba.
García confirmó que fue por unanimidad
Tras el veredicto, la presidenta del tribunal confirmó que la absolución de los cuatro imputados por el crimen de Claudio Torres fue por unanimidad de todos los jurados populares y de los dos jueces técnicos.
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Natacha García calificó como “magnífico el compromiso” de los jurados populares.
“La investigación fue ardua, que se tuvieron un montón de situaciones, simplemente que estas personas no fueron los autores” del homicidio cometido el 16 de enero de 2019.
Sobre la continuidad de la investigación para encontrar los culpables del crimen, García dijo que no es una decisión que depende de los vocales de la Cámara del Crimen.